Un proyecto, en este caso un colegio, debe tener una razón de ser, una dirección; es lo que queremos compartir con ustedes a continuación.
PRESENTACIÓN DEL PROYECTO
El colegio Alta Cumbre nace de la inquietud de cuatro compañeras de
trabajo: dos educadoras diferenciales, una psicopedagoga y una fonoaudióloga,
su anhelo era crear un colegio de educación básica que atendiera las diferentes
necesidades educativas de los niños y niñas, un colegio con pocos alumnos por
sala para así poder atenderlos de forma personalizada, conocer sus fortalezas y
debilidades de forma cabal y así poder entregarles los apoyos requeridos, en un
ambiente que les permitiera vincularse con su entorno y propiciar el cuidado
del medio ambiente, en un desarrollo humanista e integral
Es por esto, que el año 2013, después de buscar distintas ubicaciones en
la ciudad de Los Andes, para establecer el proyecto, se encontró el lugar indicado,
en el cual se realizaron diversas modificaciones, creación de espacios,
adquisición de muebles y promoción del colegio, logrando poner en marcha su
proyecto en octubre de 2013.
FUNDAMENTACIÓN
Hoy la educación es un tema; el Bullying, la educación sexual, la calidad,
la inclusión; con una visión de mayor problemática, que de brindar oportunidades
de desarrollo de nuevas instancias de aprendizaje para todos los niños y niñas,
sin discriminación. Nuestro colegio es una iniciativa educacional que ofrecerá
un sello distintivo, personalizado y pensado en una visión integral de la
educación. Porque creemos que la educación no es un problema; pensamos que la
educación es una oportunidad de crecimiento, que en conjunto con el trabajo de
la familia es capaz de crear personas, integrales y orientadas a alcanzar sus
proyectos, anhelos y sueños, donde el eje prioritario es apoyar y acompañar el
crecimiento de las personas.
Este
crecimiento y desarrollo personal, expone a los niños y niñas a desenvolverse
en diversos contextos y también nos exige como profesionales de la educación
respetar su singularidad y propiciar
estos contextos de aprendizaje, de manera tal que sean significativos y
transferibles en otros contextos donde ellos se logren desenvolver. Es por esto
que nuestra propuesta educativa, se enfatiza en tres líneas de trabajo fundamentales:
-
Atención
a la Diversidad
El
desarrollo de los niños y niñas en contextos diversos y de acuerdo a sus
necesidades educativas, nos da el pie para fomentar el respeto e inclusión en
todo su amplio significado, con el término “diversidad”. La educación inclusiva nos
permite realizar una transformación de la educación general, para dar
respuestas equitativas y de calidad a la diversidad. La inclusión está ligada a
superar cualquier tipo de discriminación y exclusión, en el entendido que hay
muchos estudiantes que no tienen igualdad de oportunidades educativas, ni
reciben una educación adecuada a sus necesidades y características personales.
Es por esto que es uno de los pilares fundamentales del desarrollo de nuestro
colegio, potenciar un cambio profundo en las actitudes y prácticas, pasando de
un enfoque centrado en la homogeneidad a uno centrado en la diversidad.
-
Educación
para la Sustentabilidad
Nuestra
otra línea de trabajo es el desarrollo de comunidades sustentables dentro de
una comunidad escolar, basándonos en la propuesta inicial de la Asamblea
General de las Naciones Unidas con la “Declaración
del Decenio para la Educación para el Desarrollo Sustentable (2005 al 2014)”, compromiso
que fue ratificado por el Ministerio de
Educación de Chile, definiendo una Política
Nacional de Educación para el Desarrollo Sustentable el
año 2009. El desarrollo sustentable es uno de los doce principios propuestos en
nuestra constitución, por ende es nuestro deber fomentar el respeto por el
medioambiente en todo su amplio significado. Por ende así como propone el Ministerio
de Educación, “la construcción de una
sociedad sustentable requiere de una educación orientada a fortalecer los conocimientos, habilidades y actitudes
que posibiliten a niñas, niños, adolescentes, jóvenes y adultos a reflexionar y tomar decisiones fundamentadas para
actuar en sus respectivos contextos, sea la familia, la escuela, el barrio, la comuna, la ciudad o el país, como un
ciudadano comprometido en el abordaje responsable de los problemas sociales, económicos, culturales y ambientales, en
un marco democrático, participativo, inclusivo y sin discriminaciones.